Ana Sofía Pereyra y Eliana Neme |
Servicio de Atención Psicopedagógica, Fac. de Ciencias de la Educación |
La génesis del SAP Motivados por el afán de promover acciones de reflexión y aportes al conocimiento y que además pudiesen tener un impacto socio- comunitario, en el año 2010 un equipo de docentes y estudiantes avanzadas de la carrera de Lic. en Psicopedagogía de la Universidad Católica de Santiago del Estero comenzó a diagramar un proyecto de investigación en el cual se proponía como objetivo principal “Conocer las modalidades de producción simbólica y los problemas de aprendizaje de niños y jóvenes en situación de pobreza de Santiago del Estero y generar herramientas clínicas y preventivas actualizadas para su abordaje”[1]. Dicho proyecto, denominado “Producción simbólica y problemas de aprendizaje en niños y jóvenes en situación de pobreza de Santiago del Estero: abordaje psicopedagógico clínico y preventivo”, fue aprobado por la Secretaría de Ciencia Técnica (SECyT- UCSE), y permitió que desde la carrera de Lic. en Psicopedagogía se comiencen a realizar intervenciones psicopedagógicas clínicas y preventivas con mirada hacia lo social que permitiesen lograr una aproximación para poder “pensar en la manera en la que niños y jóvenes en situación de pobreza van atravesando por los avatares de la constitución subjetiva, modelando la calidad de su producción simbólica y de sus formas de aprendizaje, dentro del contexto social, histórico y cultural contemporáneo[2]. A lo largo de dos años, periodo en el que duró el mencionado proyecto de investigación, se configuró un espacio que, al tiempo de ser el lugar desde el cual se fueron obteniendo los elementos para problematizar el recorte de la realidad seleccionada, se constituyó en un ámbito de extensión socio-comunitaria desde el cual se comenzó a proporcionar atención psicopedagógica clínica gratuita a niños y niñas en contextos de pobreza. Así, el espíritu del Servicio de Atención Psicopedagógica (SAP), que inicialmente estuvo ligado a la investigación, progresivamente fue migrando hacia un espacio de articulación conjunta con docencia y extensión. Las intervenciones psicopedagógicas trazadas desde el SAP (diagnóstico y tratamiento) desde un comienzo se abordaron desde una aproximación teórico- clínica cuyo trazado replica lo que se viene trabajando desde la cátedra de Psicopedagogía Clínica en la Facultad de Psicología de la UBA, a cargo de la Dra. Silvia Schlemenson y su equipo, con quienes se viene manteniendo un intercambio interinstitucional que nutre los procesos investigativos y terapéuticos. Dicha articulación intenta lograr una aproximación a la constitución subjetiva de niños y jóvenes en situación de pobreza, vincularla con las ofertas simbólicas familiares y sociales que se generan dentro de estos contextos sociales desventajados y a partir de estas premisas potenciar procesos de simbolización cada vez más dúctiles. Por lo tanto, a partir de la atención profesional del SAP “se procura que el potencial simbólico del niño y el joven (aun con limitaciones, vulnerabilidad, precariedad y pauperización) pueda desplegarse, ofreciéndole oportunidades de producción en las cuales puedan resignificarse aquellas situaciones inestables o precarias que evitaron que el deseo de entrelazamiento libidinal se constituyera promoviendo producciones simbólicas y modalidades de aprendizajes saludables y acordes a las demandas de la época actual”[3].
El proceso de institucionalización La Universidad es una institución; según Fernández, L. (1998) “una institución, es en principio un objeto que expresa cierta cuota de poder social”. Esto alude a las normas, valores y lenguaje que adquieren fuerza en la organización social de un grupo o a la concreción de las normas-valor en establecimientos. En ambos casos, expresan al mismo tiempo la posibilidad de lo grupal, de lo colectivo para así poder regular el comportamiento individual. Cuando las Instituciones se singularizan en la forma de una unidad organizacional concreta, es decir en “establecimientos Institucionales” definen un espacio geográfico, imaginario y simbólico, en donde el sujeto va a encontrar un lugar propio de pertenencia, seguridad y desarrollo y a su vez también encontrara enajenación, exclusión y sufrimiento. Los establecimientos, “tienen en el concierto social un grado relativo de autonomía que les permite especificarse y diferenciarse como un ámbito capaz de generar una cultura singular” (Lidia Fernández, 1998). Puntualmente, la Universidad como institución con objetivos propios ligados a “la formación integral de las personas para que sirvan a la sociedad y a sí mismas de manera creativa, humana y eficaz” es un escenario en el que la educación permite acceso al saber y el entrenamiento al trabajo (Ceballos Melguizo). Esta concepción clásica permite comprender que en sus espacios circularán determinados sujetos atravesados por los mismos objetivos: docentes, estudiantes, tesistas, ligados a la enseñanza y al aprendizaje de lo que la academia plantea en cada recorte disciplinario. No obstante, cuando se advierten circunstancias que quiebran lo instituido, lo establecido y lo esperable, las dinámicas institucionales adquieren un matiz propio a partir de la tensión “instituido- instituyente”.
En la UCSE, la Lic. en Psicopedagogía cuenta con 32 años de historia de formación académica. Durante este tiempo, varias fueron las experiencias que se desarrollaron buscando acercar a la psicopedagogía al contexto, que tuvieron que ver con proyectos de intervención desde las cátedras, capacitaciones, asistencia a instituciones educativas, etc. Desde siempre, estas acciones tuvieron foco en los sectores más vulnerables de la sociedad, los cuales requerían de la presencia de los profesionales brindando ayuda y colaboración frente a las problemáticas presentadas. No obstante, ellas difícilmente estaban ancladas a propuestas sistemáticas de investigación que les permitiesen sostenerse en el tiempo, siendo experiencias a corto o mediano plazo. Es sabido que el proceso de institucionalización contempla dos conceptos importantes para su comprensión: por un lado lo “Instituido” de una institución y por otro lo “Instituyente”. Entendiéndose al primero como aquellos que es fijo, lo que se encuentra establecido y conserva organización imperante, y atendiendo a lo Instituyente como aquello que tiene la función de cuestionar lo establecido, lo interpela y propone algo nuevo, opuesto y transformador intentando modificar ese orden que se ha establecido. En este sentido, se podría decir que el SAP se convirtió, al interior de la carrera y también de la universidad, como un “instituyente” que en cierta medida modificó el paisaje institucional y las prácticas e intervenciones que se venían realizando. Como ejemplo de esto se menciona que la presencia de niños, adolescentes y adultos a cargo de sectores populares al ámbito universitario, quienes asistían al Servicio para los encuentros semanales de diagnóstico, generaron diversos movimientos y posicionamientos relacionados con lo novedoso, reflejó la tensión antes mencionada, donde el espacio instituido era interpelado por nuevos sujetos que demandaban prácticas distintas. El hecho de que progresivamente los actores institucionales fueron incorporando la función y la misión del SAP ubicándolo espacialmente, advirtiendo la posibilidad (y la realizad) de una oferta que articule docencia, extensión, intervención clínica e investigación, integrando en los pasillos de la universidad a los niños y jóvenes asistentes y en cierta medida naturalizando su presencia fue dando cuenta del proceso de institucionalización del mismo en la UCSE. Cuando lo instituyente adquiere identidad dentro de la institución mediante un proceso organizacional de transformación de un grupo, puede decirse que se ha plasmado el proceso de “Institucionalización”. Asimismo, puede aludirse este proceso de transformación no sólo a los grupos, sino también a las prácticas y sentidos imperantes en su marco. En tanto las instituciones para instituirse como tales, inventan significaciones, éstas se definen como “producciones de sentido”, de sentido organizador. “Estos esquemas organizadores son condición de representatividad de aquellos que esa sociedad puede darse” (Ana María Fernández, 1992). Estas significaciones son imaginarias porque están dadas por creación o invención, y también son sociales porque sólo existen siendo objetos de participación dentro de un colectivo o anónimo. La institución de normas, valores y lenguaje no son sólo herramientas para hacer frente a las cosas, sino más bien son los instrumentos para hacer las cosas, en particular para hacer individuos.
El encuadre teórico del servicio El marco teórico que fundamenta las intervenciones clínicas contiene el encuadre del dispositivo clínico trabajado en la cátedra de Psicopedagogía Clínica de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA), el cual fue replicado en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Católica de Santiago del Estero y que se materializa en el Servicio de Atención Psicopedagógica a niños y adolescentes provenientes de escuelas aledañas, inmersas en contextos de pobreza. Dicho encuadre se enmarca en los aportes del psicoanálisis contemporáneo, cuyos autores más destacados y que contribuyeron a la Psicopedagogía Clínica son: André Green, Piera Aulagnier, Julia Kristeva, Silvia Bleichmar, Cornelius Castoriadis, entre otros. Los aportes de dichos autores fueron estableciendo una especificidad en la Psicopedagógica Clínica, desde la cual el aprendizaje es estudiado desde su vertiente subjetiva, apelando a conceptos como producción simbólica, actividad representativa, restricciones en la productividad simbólica que aluden al posicionamiento teórico y clínico desde el cual se analizan los problemas de aprendizaje.
Propósitos, objetivos y actividades del SAP Desde sus orígenes, el SAP se propuso constituirse no solamente como un ámbito de trabajo solidario y socio-comunitario, sino también como una alternativa eficaz dentro de la formación académica que permita que las estudiantes avanzadas y las noveles profesionales puedan ir fortaleciendo todo lo adquirido durante su proceso formativo. Es por ello que, a las intervenciones psicopedagógicas en los ámbitos de diagnóstico y tratamiento, se suman también los espacios de formación y capacitación y los procesos propios de la investigación en el marco de la articulación teórico- clínica. Desde estos propósitos, los integrantes del SAP se plantean anualmente sostener las intervenciones a partir de ateneos y grupos de estudio, registrar todo las producciones que se van elaborando a partir de estos encuentros y participar activamente en la difusión de estos nuevos conocimientos mediante la participación en Jornadas y Congresos.
Las actividades principales que se desarrollan desde el SAP y que permiten la articulación docencia- extensión- investigación son:
Dicho proceso es realizado anualmente desde las cátedras Clínica Psicopedagógica I y Técnicas Proyectivas del 4° año de la Lic. en Psicopedagogía (Plan 1983), están a cargo de las alumnas quienes los realizan como parte de sus prácticas y son supervisadas semanalmente por las profesionales del equipo de las cátedras mencionadas. El diagnóstico psicopedagógico se realiza en ocho encuentros aproximadamente, con una duración de 40 minutos por entrevista. El proceso cuenta con las siguientes instancias:
A partir de los resultados de los diagnósticos psicopedagógicos, volcados en las respectivas síntesis, muchos niños y niñas son derivados a tratamiento psicopedagógico grupal donde se despliega dicho dispositivo terapéutico (tratamiento) a los fines de dar continuidad al diagnóstico realizado garantizando el sostenimiento del Servicio. Al inicio del tratamiento también se hace firmar a los tutores el formulario de consentimiento informado con idénticas especificaciones a las hechas durante el proceso de diagnóstico. Caracterización del tratamiento psicopedagógico:
Impacto del SAP desde su creación hasta la fecha Debido a las actividades que se vienen realizando en el Servicio, se ha podido evidenciar un doble impacto:
Este impacto se hace visible en los siguientes productos:
Algunas proyecciones… Luego de cuatro años de tarea ininterrumpida, el SAP se ha transformado en un ámbito significativo que permite otorgar la oportunidad de un tiempo y un espacio a los sujetos que requieren de intervenciones profesionales acordes a sus necesidades, desde un encuadre teórico sólido y a través del intercambio fluido no solamente con los adultos a cargo de los asistentes sino también con las instituciones derivantes. En este sentido, el Servicio responde a la doble misión de la Universidad Católica: ser formadora de nuevos profesionales y contribuir con el entorno social a partir de acciones concretas. Conforme fue creciendo y tomando importancia, y una vez que finalizó el Proyecto de investigación del cual fue subsidiario, en el año 2012 la filiación institucional del Servicio de Atención Psicopedagógica quedó formalizada cuando pasó a integrar el Área de Extensión de la Facultad de Ciencias de la Educación, desde la cual y conjuntamente con la Coordinación de la Lic. en Psicopedagogía se acompañaron las actividades inherentes al mismo. En estos momentos, el SAP se propone nuevos horizontes relacionados a ampliar la atención a adolescentes de los sectores favorecidos por el Servicio, y a la vez se propone nuevas líneas de investigación que sostenga la relación interinstitucional con la UBA.
Bibliografía
[1] Proyecto de Investigación “Producción simbólica y problemas de aprendizaje en niños y jóvenes en situación de pobreza de Santiago del Estero: abordaje psicopedagógico clínico y preventivo”. [2]Ob. Cit. En 1. [3] Ob. Cit. En 1. |